Algunas veces podemos encontrar en las fincas que poseen cítricos, especialmente en los limoneros, frutos con formas raras e inusuales. Hasta el punto de reconocer que es un limón porque está colgando de la rama de un limonero, pero no por su forma, ya que en ocasiones es tremendamente rara.
El responsable de esta deformación es un diminuto ácaro, de tan solo 0.2 mm de longitud, y que solo es posible ver con una lupa, ya que a simple vista no podríamos observarlo.
Ácaro de las Maravillas (Aceria Sheldonis)
Este ácaro se le conoce vulgarmente como “ácaro de las maravillas”, y su nombre científico es Aceria Sheldonis. Se desplaza gracias a la acción del viento o a través del material de poda infectado. Cuando llega a una nueva planta ataca a las yemas y a los brotes en formación, quedándose a vivir en el interior de los mismos. Una vez dentro pica a las células, y produce unas alteraciones que provocan la malformación del brote o del futuro fruto. Cuando ataca a una flor, lo más normal es que se caiga y se pierda, pero en ocasiones la flor llega a cuajar y algunos frutos infectados evolucionan y llegan a formar unas figuras singulares y caprichosas.
El ataque del ácaro al fruto del limón le influye sólo en su forma, ya que el fruto mantiene su aroma y el sabor. Es perfectamente comestible, debido a que solo influye en que se altera la forma simétrica del cítrico.
misteriosa forma de un limón
Muchos utilizan acaricidas para combatirlo, pero si solo os afecta eventualmente a algún que otro limón, os animo a disfrutar de esa forma tan rara a la par de hermosa que nos da la naturaleza.